Desde
la distancia le llegaban cantos
en
desconocidas lenguas, que a su percepción,
transcribía
en urgentes versos de elucidas señales
bajo
un alud de impertinencias impronunciables
incitándoles
al refugio hermético
del intimismo más lóbrego y anti- conceptual .
Sobrevivió,
vitalmente inédito, participante fiel
de
cuantas peñas y tertulias literarias
se
adosan a la farándula citadina
de
los intelectuales, ilustres y consagrados,
donde
fue un naufrago de intenciones
que
pagaba caros whiskys
mientras
se embriagaba con barato aguardiente.
Promiscuas
jerigonzas posteriores
le
apresaron en marañas de tacones, y otras fintas,
sin
entonaciones ni alivios de bergantes y poetas.
Inversión
y pluma retórica ante la desinencia
de
vocablos para el disimulo y el desvío.
pichy
Un poema que apresa e invita a seguir leyendo.
ResponderEliminarOlvida la ensoñación personal, con un futuro truncado, sin embargo, amigo, se revela todo lo contrario.
Realmente fantástico.
Besos
Muchas gracias, amiga, por tan agradable comentario. Este poema es pura realidad y vivencia; de un personaje, con el que intercambié palabras y saludos, sin jamás recordar su nombre. Besos
ResponderEliminarEste es mi comentario. No sé hacer otro.
ResponderEliminarDesde la distancia le llegaban cantos
en desconocidas lenguas
y transcribía en urgentes versos elucidas señales
bajo un alud de impertinencias impronunciables
incitándoles al refugio hermético del intimismo
lóbrego y anticonceptual .
Sobrevivió, vitalmente inédito, fiel participante
de cuantas peñas y tertulias literarias
se adosan a la farándula citadina,
entre intelectuales ilustres y consagrados,
en donde fue un naufrago de intenciones
que pagaba caros whiskys
mientras él se embriagaba con barato aguardiente.
Promiscuas jerigonzas posteriores
le apresaron en marañas de tacones, y otras fintas,
sin entonaciones ni alivios de bergantes y poetas,
con inversión y pluma retórica, ante la desinencia
de vocablos para el disimulo y el desvío.
Pues, me va bien el comentario; no hace falta más.
EliminarAbrazos