Sólo
los niños dominan el sitio justo
en que se curva el paraíso
en que se curva el paraíso
para
perdonar haberes.
Días tengo en que todo me dirige al sol
y
en la casualidad las nubes lo cubren
tan
solo por contradecirme el día
Sólo
a la inocencia
le
es dado circular al revés
los
caminos que dispone la cordura.
Porque sus atrevidos pasos
Porque sus atrevidos pasos
palpitan
etéreos
sobre las antiguas generaciones.
sobre las antiguas generaciones.
Pichy
Muy bello:
ResponderEliminarCuantas veces te asomes a la vida
y reflexiones
experimentarás en ti
una incógnita de soledad.
Cuantas veces te apoyes en el balcón de la vida
Y reflexiones
Experimentarás que siempre hay algo más
Que te obliga
Te asombra
Te inquieta
Y no sabrás descifrar:
Son tus anhelos de eternidad...
© Luis Vargas 1969
Muchas gracias, amigo. Muy bueno el poema-comentario —facilidades que tienes!—.
ResponderEliminarAbrazos
Fíjate que el poema está escrito en 1969 cuando yo tenía 22 años y está inspirado en uno de Rilke y apenas había ya asonancias.
ResponderEliminarUfff, Cómo ha llovido, amigo. Sí, me fijo que ya eras un buen poeta.
ResponderEliminarAbrazos