martes, 26 de marzo de 2013

CUENTO CHINO


Hubo una vez un país

donde había progreso y bienestar.


...trabajo, buenos salarios,

préstamos, hipotecas, orden, alimentos

 y casas para todos.


La clase media crecía y los jóvenes

podían trabajar o ser universitarios.


Octava potencia mundial, país del sol,

la alegría y el desarrollo creciente.

 
Pero un buen día, vino un viento europeo,

muy frío, cargado de promesas legales

de la conveniencia de crear un imperio

mercantilista con una sola moneda.


Promesas constituyentes de subterfugios

e invasiones para empobrecer a este país.

 
Y así llegó "la prima de riesgo" "la recesión"

y con un manto negro apareció "LA CRISIS"


Las tres señoras eran brujas conceptuales

cuya misión era apoderarse de la riqueza,

costumbre y bien vivir del ciudadano.


El riesgo de la prima oscura, no era otra cosa

que el riesgo que corría el pueblo

de perder el trabajo, la casa y los ahorros,

que insistentemente, con impuestos

y otras argucias, reclamaba el gobierno

adherido a ese viento helado europeo.


Había que fortalecer el sistema bancario

y especulativo de las finanzas, y aniquilar

la clase media económica.
 

Sólo podía haber ricos y pobres y aparecieron

las estafas, los millones en paraísos fiscales.


Subieron los impuestos de todo, bajaron los sueldos,

cerraron mil empresas, y los bancos se fortalecieron

apoderándose de los depósitos corrientes

convirtiéndolos en preferentes...- preferentes para ellos-

se desahuciaron a los que ya no podían pagar sus deudas

sacándoles de sus casas a empujones, y la legalidad

gubernamental,  reformó la Ley Laboral donde el patrón

podía despedir sin indemnización con sólo estimar

que ese año iba a ganar mucho menos -a pesar de sus muchas ganancias-

se recortaron las subvenciones a los parados

y la sanidad pública mermaba y desaparecía con imposibles

copagos, la gente trabajadora empezó a sentir miedo, hambre,

necesidad, sin casa y en la calle, comenzaron a emigrar.


Las protestas en la vía pública, la indignación del obrero,

las reivindicaciones y peticiones al gobierno

ningún gobernante las escuchó. Los políticos vivían bien.


Se agitaban los brazos, se alzaba la voz, algunos suicidios,

y llamaron a las puertas de las grandes mansiones del poder...

 
¡Eso es ilegal! comentó el gobierno:

¿por que yo le desahucie, le acose a impuestos, le quite

los medicamentos, le niegue el trabajo, las becas de estudio,

las subvenciones, permita que su banco le robe el dinero

que le dejó en custodia y le ponga tasas si quiere denunciar,

va usted a echarme en cara y molestarme en mi casa

que a usted le va mal?


¿¡No ve que estoy salvando al país de la crisis tan grande

que hemos creado los poderosos, los grandes del país,

para que con vuestro esfuerzo y sacrificio sigamos viviendo,

los ricos bien, calentitos en casa, y podernos ir de vacaciones

a las islas Caimán!


Su protesta es ilegal, porque lo dice la ley  que he confeccionado yo:

el poder.


Ustedes, esbirros de la gleba, ¡a callar! ...


Y así fue como ese país fue invadido por los bárbaros del norte

-como en otros tiempos-

como las invasiones napoleónicas, como los países de ultramar,

por imperialistas avariciosos con ideas maquiavélicas y kafkianas

logias de poder especulativo y virtual.


Y así se apoderaron de ese país y de otro y de otro más, siendo

cómplices los gobiernos corruptos, escudados en una CRISIS

ficticia acomodada a resortes falsos de escasez y recortes.


Como desaparición de dinosaurios, no queda hoy en el mundo

ilusión, ni democracia, ni obreros, ni campesinos, ni asalariados.

Sólo unos esclavos que cuidan los campos de golf, los yates,

las grandes mansiones y el tesoro escondido que disfrutan

los poderosos como un reino de dioses, pero sin dios, en un edén

para gente importante.


Y colorín colorado, este cuento de pura fantasía

se ha terminado.

 
Ah, ya no existe ese país. Ahora es...otra cosa.

 © Luis Vargas
 

30 comentarios:

  1. Buen poema coloquial, que me recuerda a Serrat, cantando de Machado: Ya hay un español que quiere / vivir y a vivir empieza,/ entre una España que muere / y otra España que bosteza. / Españolito que vienes / al mundo te guarde Dios. / una de las dos Españas / ha de helarte el corazón.
    Ahora, para mí, el torbellino vino del Yuma. Quisieron los poderosos de Europa Norte, enfrentar papel contra papel (respaldando una moneda, exclusivamente, con su PBI). Ah, no tuvieron en cuenta la gran producción de billetes que tiene la Yuma —quisieron bailar en casa del trompo—. Los "especialistas" yumas sonrieron, y dejaron que el euro fuese más "fuerte" que el dólar...que importa eso; así es más fácil vender, y, a la larga, comprar; porque les llenan las arcas de billetitos verdes, en gran reciclaje; para su gran bienestar. Ya no tienen que luchar contra el marco y demás monedas por separado. Se la pusieron más fácil; ahora, todos con euros —las fuertes y las débiles economías—. Qué vacilón! Y, como los Consorcios monopólicos no tienen banderas ni fronteras; lo mismo compro en Bucarest, que en Praga, que en Madrid; donde mejor me lo pongan. Ah, los veteranos ingleses —padres al fin—, no entraron en el jueguito — siendo los principales aliados; tal parece que se lo advirtieran—, y ya hasta valoran su permanencia en la Unión. Tenían que haber comenzado con una moneda compensatoria entre los países de la Unión —lo sabe un escolar—, si de verdad querían hacer una Unión (tipo Yuma; una Federación, que los situara como Potencia económica). Claro, Alemania, y otros —de momento, junto a UK—, van por sus hermanos…y si la Unión y su moneda, no les sirvieron para aguantar a los Yumas; les sirve para erguirse sobre los hombros de esos hermanos. No puedo pensar que los economistas europeos fueran ingenuos, y de verdad pensaran aumentar la posición económica de Europa, con una moneda única, que no contemplara compensaciones…eso es el equipo de fútbol de La Habana, jugando en la Liga Española, sin refuerzos. Inglaterra está presta para abandonar la Unión, en cuanto sea necesario. Alemania, saca su provecho y reafirma su liderazgo de consuelo —nada más allá—. Japón, se dejó tentar…y ya sufre las consecuencias —a pesar de su gran reserva de dólares; que al final les ha servido más, para ayudar a los Yumas, que a su beneficio—. Al final, tenemos, que Europa no pasa de ser un gendarme —aunque pomposamente se llamen Aliados— de los Yumas, que amén de minarlos económicamente, le hacen subvencionar parte de sus aventuras bélicas. Hay una realidad histórica, a pesar de compartir una zona geográfica, Europa es la historia de sus guerras, la competencia despiadada entre unos y otros, nunca han logrado una unión entre más de cinco países —para nada—, ni siquiera contra el fascismo —donde se unieron bajo las órdenes de los Yumas, con los Padres Ingleses como Lugarteniente (muy diferente de la historia de la América hispana), tampoco les une la lengua, nada…qué cosa! Para buscar algunas simetrías, se necesita dividirla, al menos, en tres. Ja! Qué me fui del tema, hombre, que termino de político, cuando lo que busco es escribir poemas. Disculpen.
    Abrazos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Fue tu amor una desdicha,
      una huella de escarabajo,
      una pena con trabajo,
      el veneno de una bicha;
      mano que trincha y trincha,
      chaquetas de mil colores
      puso a prueba los furores
      de tu genio maquiavélico,
      de demonio, que no Angélico
      produciendo mil dolores.

      Una Europa gaseada
      con euros que envenenaron
      mil países que acataron
      una deuda mal prestada,
      impuesta y condicionada
      a designios imperiales
      de Estados muy principales,
      de un reich avaricioso
      con Banco Central gracioso
      y una troika que avasalla.

      © Luis Vargas

      Eliminar
    2. Pues, hasta mejor. Sigue el hilito...no lo pierdas, sigue, sigue el hilito del dinero. Las huellas del dinero son las que guían a la verdad. Aunque han existido, y existen, quienes no buscan dinero, no: esa es otra especie, que busca el encumbramiento personal...pero, es muy rara, hoy en día, éstos están en extinción.

      "Es la hora de los hornos, y no ha de verse más que la luz.

      Revolucionariamente.

      pichy

      Eliminar
    3. yuma
      adj.-com. etnog. Díc. del individuo perteneciente a un importante grupo de tribus indígenas de América del N que ocupan la cuenca baja del río Colorado y se extienden hasta el valle del río Gila y parte de la península de California.
      m. ling. Familia de lenguas amerindias habladas en Arizona, California y territorios vecinos de México.

      Eliminar
    4. Eso es...sí, los yumas, los gringos, los yanquis (no por el equipo de béisbol de New York, no; que así le llamaban los del Sur a los del Norte —nacidos en la nueva Inglaterra— durante la guerra de Secesión), los jonis. Bueno, por acá —y por extensión— muchos jóvenes les llaman yumas, a los turistas extranjeros.

      Lleva carta!

      Eliminar
    5. Es muy largo el estadounidense"...norteamericanos; incluye a los canadienses...americanos; es un latrocinio, que han usado sin sonrojo; porque, americanos, somos todos los nacidos en América. Y todos los que tenemos dos dedos de frente, no se lo aceptamos.

      Abrazo

      Eliminar
  2. Como cuento chino, está muy bien, pero no me gusta como poema. No encuentro la esencia poética (veo prosa en frases cortas), aunque la ironía, lo enriquezca.
    Besos



    ResponderEliminar
  3. ¿y cual es la esencia poética? ¿podría ser un poema de realismo sucio con palabras cotidianas, sátira, ironía, con esquema de cuento? ¿podría ser un poema de llanto y queja...podría tener melancolía y pena; acaso no suscita emociones encontradas...podría ser un sugerente mensaje apocalíptico?

    ¿Qué es entonces?

    ResponderEliminar
  4. Quizás por su inicio "hubo una vez..." y la paráfrasis de realismo cotidiano no le veo poética sino una narrativa con ingenio.
    Si tu creed que puede ser un poema realismo sucio, o un poema de lamentaciones o un mensaje apocalíptico, pues podrá ser ,pero yo no me acostumbro a esta realidad poética...

    ResponderEliminar
  5. Bueno, yo no afirmo ni niego nada, sólo sé que yo he escrito un poema, cuya realidad, está en la fantasía de cada uno, porque lo que allí se cuenta no pasa en ningún sitio...¿no? pero mira que poemas más bonitos te dejo aquí -en otro cuadrito que aquí no cabe- para que te vayas acostumbrando y hay cientos sobre la situación actual por todo internet...

    ResponderEliminar
  6. Las obras del realismo sucio hablan de la vida común y traslada al lector a escenas de cotidianidad con un uso del lenguaje muy directo y llano. Tanto es así, que las escenas sexuales se tornan crudas y carentes de tensión sexual y son descritas con un lenguaje siempre directo y conciso.
    De igual forma, los protagonistas de estas historias son los ANTI HÉROES, una figura fundamental en la literatura norteamericana y que el realismo sucio describe como personajes ausentes, perdidos en la sociedad, desesperados y rutinarios. Pero quizá, si hablamos de en términos de éxitos y fracasos, los anti héroes se tornan representantes del fracaso del estilo de vida americano. Representantes del aquí y ahora y de los momentos simples de la vida, buenos y malos.
    Las historias que nos cuenta el realismo sucio prescinden del exceso de adjetivos, de situaciones imaginarias y de grandes historias. Como su propio nombre indica, las historias están centradas en la simple y sucia realidad cotidiana que nos rodea.
    éxito a escritores como Charles Bukowski, Raymon Carver o Richard Ford.

    Dentro de la generación poética cubana del 50, destaca la voz de Fayad Jamis (México, 1930- Cuba, 1988), por su compromiso político humanista y por la unión de imágenes surrealistas y coloquialismo.
    LA VIDA
    ¿Querías que el poema fuera solo
    la sombra de la lila el recuerdo de la fuente
    el día puro ahogándose en mi angustia?
    ¿Querías que el poema sólo hablara en voz baja
    en medio de la tarde
    cuando el sueño con olor a savia entra en los nidos
    y tantas cosas vivas parecen estar muertas?
    Pero ahora mientras tú me escuchas la primavera estalla
    y mi poema no tiene lilas ni venas adormecidas
    sino el cercano rumor de la realidad
    Yo mismo me muevo y trabajo y remuevo
    cosas viejas e inútiles y siento
    cómo respiran mis hermanos de lucha
    y mientras fumo nace este poema
    y mientras crece mi poema
    canta en mi patria la primavera
    Querías que sólo hablara mi silencio
    y ahora mis huesos gritan y mi voz no está sola
    y te digo que la noche es hermosa en la ventana
    y más hermosa en el sudor de los que luchan
    en el taller o en la trinchera
    en este instante en que una estrella de alas blancas
    perfora la oscuridad del mundo
    Pues aunque esperes que de mi poema
    la sombra de una lila caiga en la tarde
    sólo verás caer mi puño cerrado y en mis versos
    florecerá con todos sus fuegos la vida.
    Por esta libertad, 1962.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. El Moro, dicen, fue un buen poeta y revolucionario. Poco he leído de su obra.

      Eliminar
  7. En España, el discípulo más aventajado de Charles Bukowski es Roger Wolfe (1962), escritor de origen británico, cuya poesía se sitúa entre el realismo sucio y el expresionismo.

    A NINGUNA PARTE
    Los pensionistas hablan de trombosis
    en los autobuses
    o aguardan el final
    en los bancos de los parques públicos,
    entre excrementos de palomas y jeringas
    ensangrentadas,
    o me paran en la calle
    ante escaparates llenos de electrodomésticos
    para preguntarme la hora
    e interesarse por la raza de mi perro.
    Son las cinco de la tarde y todo
    en la ciudad apesta a muerte.
    Sé que es inútil. Llegar a casa,
    ponerme aquí delante y redactar
    quince o veinte líneas, qué más da,
    esta especie de salvoconducto
    a ninguna parte.
    Hablando de pintura con un ciego, 1993.
    NADA QUE HACER
    Hay personas
    que opinan
    que el poema se parece
    a un chiste.
    Otros, sin embargo, consideran
    que es más que nada un acto
    de inteligencia.
    Yo lo que creo es que la mayoría
    de las ocasiones
    se asemeja mucho
    a la vida.
    Ya lo veis.
    Un chiste tonto.
    O peor:
    de mal gusto.
    Hablando de pintura con un ciego, 1993.
    METAFÍSICO ESTÁIS
    El tipo dijo
    con palabras elogiosas
    que en el fondo
    le agradezco:
    «…he aquí el milagro
    de una lírica
    que se construye
    en el vacío…»;
    y miré los muros
    de esta casa
    que no es mía
    y no hallé cosa
    en que poner los ojos
    que me ayudara
    a pagar el alquiler.
    Y tuve que darle
    la razón.
    Mensajes en botellas rotas, 1996.
    Etiquetas:realismo sucio, XX, XXI
    La poesía del estadounidense Raymond Carver (1938-1988) comparte algunos rasgos con sus magistrales cuentos: el interés por lo cotidiano; la capacidad de trasmitir intensas emociones a partir de hechos aparentemente irrelevantes; el tono coloquial; y la empatía con otros seres, como él, solitarios y perdedores.
    POEMAS
    Han llegado todos los días este mes.
    En una ocasión dije que los escribía
    porque no tenía tiempo para nada
    más. Queriendo decir, por supuesto,
    para nada mejor, mejor que para simples
    poemas y versos. Ahora los escribo
    porque me apetece.
    Más que otra cosa porque
    estamos en febrero
    cuando no sucede gran cosa
    normalmente. Pero este mes
    han florecido los alerces,
    y ha salido el sol todos los
    días. Es cierto que mis pulmones
    se han recalentado como un horno.
    Y qué me da a mí si hay gente
    que está esperando que se le caiga
    el otro zapato, donde me afecte.
    Bueno, aquí está pues. Adelante.
    Póntelo. Espero que se ajuste
    como un zapato.
    Lo suficientemente ajustado, sí,
    pero suave para que el pie tenga espacio
    para respirar un poco. Levántate. Date
    la vuelta. ¿Lo sientes? Irá adonde
    tú vayas, y estará allí contigo
    al final de tu viaje.
    Pero de momento quédate descalzo. Sal
    afuera un rato, y juega.
    Un sendero nuevo a la cascada, 1989.
    Etiquetas:realismo sucio, XX

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias. Tengo gran parte de la obra de Bukowski y Wolfe en ebook, pero también es cierto que he leido poco.
      Intentaré familiarizarme algo más con esta poesía, para poder comprenderla y quien, sabe lo mismo le cojo el gusto y...

      Besos.

      Eliminar
  8. Interesante intercambio. Lo mejor de nuestros intercambios, es que se convierten en lecciones; y terminan siendo productivos.
    Estoy "complicado". Cuando pueda me incorporo al intercambio.

    Abrazos

    ResponderEliminar
  9. Bueno, felizmente de acuerdo, muy bien...en el realismo sucio se va al lado oscuro de las cosas con palabras "no poéticas" —las prosaicas del diario— y discurso conversacional. Quizás, este poema sea demasiado coloquial y baja intensidad—y de ahí, la no asimilación de Bego; porque, "choca" con su gusto y buen desempeño, en el realismo claro—. Bukowski, se mueve del realismo sucio a la anti-poesía: digo yo. A mí, me gusta una media, entre el sucio y el claro; pero, sobre todo, me gusta la poesía de "la necesidad" y de la "conciencia", es decir, la nueva poesía revolucionaria. Lo que no quita, que disfrute la poesía intimista; porque mucho de ella me cautiva, por igual, la actual "nueva poesía" —que algunos llaman "inteligente"; que tendiendo al realismo claro, no se entrega fácil—...Que para gustos se han hecho los colores, y cada cual realiza en sí, el poema que le presentan, con su percepción —incluso, hay poemas que sólo se pueden realizar en un contorno: claro, bien pueden, luego, internacionalizarse y realizarse en todos; por aquello de que “bien nacional, para lograr el alcance mundial”, tal sucede, por ej, con Lorca—. Lo que sí, para mí (que saben, no me llevo bien con la teoría — y sobre todo, tengo mis deudas con la sintaxis de la lengua española; porque, es palpable que no la estudié—) se deben cumplir los preceptos de ritmo e intensidad; y sólo esto, debe llevarnos a desechar un poema como tal. Claro, la intensidad, también se da en las imágenes, no tiene que ceñirse perentoria y estrictamente, a la semántica de las palabras que van conformando los versos. También, hay que tener en cuenta las traducciones, fíjense el buen ritmo que alcanza el cubano —que también Bukowski, alcanza en su inglés; idioma este, que a pesar de su pobreza, se presta fácil al ritmo, por el acercamiento fonético entre muchas de sus palabras—. Nada, me incorporé tarde —en contra de mi voluntad— y quería dejar caer mis opiniones, para mantener la troika.
    Abrazos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Mucho me extraña no ver aquí los consejos que dio Pichy a Bego sobre el estilo que uno debe mantener en poesía que me parecieron muy acertados, sobre todo cuando hablaba de la locura de Niszche y todo eso....
      Pues bien, yo quiero dejar aquí algunas aclaraciones sobre el concepto sobre la poesía y el poema y nuestra Senda.
      El cuento es una narración corta -normalmente fantasiosa o ficticia como en el caso de mi poema- que mediante la ironía y la fábula, la quintaesencia de las cosas va revelándose y denunciando los peligros de las conductas, más o menos desviadas socialmente, que van influyendo en la realidad, alertando de lo presente, lo futuro y lo futurible (futurible: todo aquello que pudiera ocurrir, pero que no ha ocurrido, aunque es posible que ocurra) y que si se escribe en poema, en líneas cortas, no deja de ser algo parecido a lo que hacían los juglares con las trovas en la Edad Media, con las cuales llevaban noticias de un sitio para otro, unas veces fabuladas y otras reales, unas veces cantando y otras recitando, mencionando temas cotidianos o de gran altura como las cosas que ocurría en la nobleza y en la Corte.
      Explicaban los sucedidos en el reino o el contorno más inmediato, tanto si eran sucesos macabros, o los amores de Romeo y Julieta o las maravillas del campo; explicaban la conducta humana más inmediata y los enredos sociales de los grandes señoríos, dando así conocimiento e información y moralidad a una comunidad urbana o campestre, a otra comunidad, comarca o provincia. Y también contaban leyendas y cuentos morales o eróticos como lo fue EL LIBRO DE BUEN AMOR, realizado en versos propios de la época. El Arcipreste al escribir sus cuentos usa en sus obras estrofas de cuatro versos, los cuales son alejandrinos, es decir, de catorce sílabas, aunque en algunos versos podemos encontrar alguna irregularidad métrica. Por lo tanto el Arcipreste utiliza en sus poemas el uso de cuaderna vías. Estos versos tienen una rima consonante que varía solamente de estrofa a estrofa. Su esquema es el siguiente:
      14 A 14 B
      14 A 14 B
      14 A 14 B
      14 A 14 B ...
      Sería una zagala de tosca y parda saya,
      con caliente pellico de una abrigada cabra,
      con zurrón abultado que alimento guardara,
      con calcetines rudos, hilados en mi casa,
      adornados con cintas del color de la grana.
      Calzaría chapines de cordobán de vaca,
      y llevaría un gorro de estameña forrada.
      Ofrecería al Niño leche, buen queso, natas,
      un cordero pequeño de rizosa pelada…
      Y le diría versos que yo guardo en el alma.
      La palabra juglar viene del latín jocularis, joculator, que significa 'bromista u hombre de chanzas'.
      El mester de juglaría destinaba su producto a un público muy vario y poco escogido en las plazas de los pueblos o de los castillos, con un estilo de verso irregular y anisosilábico de rima asonante en largas tiradas monorrimas, con habitual retórica.
      Así nacieron las églogas, las serranillas, los cantares de gesta, las Cantigas de Amigo, las Cantigas a Santa María, El libro de Aleixandre y los cantares de gesta como los Nibelungos, El Cantar de Mio Cid la Chanson de Roland, una vez que el mester de Juglaría (mester = menester u oficio) donde se empezaba a desarrollar la lengua romance procedente del latín vulgar o lengua de Oc desde La Provenza extendiéndose a la Península Hispánica, después se fue perfeccionando y cultivando, convirtiéndose en mester de Clerecía que se engendro en ámbitos cultos clerical.
      Continúa...

      Eliminar
  10. Continuación
    Hoy, en la modernidad o actualidad del siglo XXI, cabe la posibilidad de escribir en versículos, cuentos, églogas, cantares de gesta, sin rima y sin métrica (sin ayudarse de la "cuaderna vía" que era lo habitual en la Edad Media) y que llamándola prosa poética, antipoesía o "cuento chino", no deja de ser poesía o poema, pues aunque choque con lo tradicional -tanto clásico como modernista- si conserva los tres elementos fundamentales del poema, a mi me parece válido: ritmo, ironía, sugerencia y revelación. Y como deía Gil de Biedma, "la poesía no es solo comunicación, ni conocimiento, sino poema, con los problemas propios de la síntesis que resuelve mediante palabras colocadas apropósito en lugares determinados del verso, con la resolución del simbolismo de la experiencia real, creando otra experiencia indiscutible, única e indisoluble.
    ¿Cuentos quieres, niña bella?
    Tengo muchos que contar,
    de una sirena de mar,
    de un ruiseñor, de una estrella
    y de una odalisca mora,
    con sus perlas de Basora
    y sus chales de Bagdad.

    Rubén Darío
    ------------------------
    - Caperucita, la más pequeña
    de mis amigas, ¿en dónde está?
    - Al viejo bosque se fue por leña,
    por leña seca para amasar.
    - Caperucita, dí, ¿no ha venido?
    ¿cómo tan tarde no regresó?
    -Tras ella todos al bosque han ido
    pero ninguno se la encontró.
    - Decidme niñas, ¿qué es lo que pasa?
    ¿qué mala nueva llegó a la casa?
    ¿por qué esos llantos? ¿por qué esos gritos?
    ¿Caperucita no regresó?
    - Sólo trajeron sus zapatitos
    ¡Dicen que el lobo se la comió!
    Francisco Villaespesa (1877-1936)
    Y dicho esto, podríamos hablar o explicar el tema del cuento en cuestión y sus resortes internos sobre la teoría de la conspiración y rivalidad de los gobiernos, sus entramados organizativos para hacerse con el poder feudal de las tierras, las ciudades, las industrias, la cultura, los alimentos, las regiones, los estados y los países, pero al "poema-cuento" no le interesa ese aspecto, pues para eso están los ensayos político-económicos, porque lo mismo da que los entresijos que cuenta el cuento los hayan provocado los yumas, los gengis khan, los napoleones, los hitler, los castro, los lenins, los hunos o los otros. Pues el poema cuenta, es solo denuncia, información, sugerencia, aviso, dolor de alma y relación entre verdad e injusticia.
    Dicen que todo poema bien estructurado ha de ser evocador, posibilitador de emociones e inspirador de experiencias y conocimiento hacia quien lo lee y esto es lo que ha sucedido aquí con Pichy que se explaya en explicar -partiendo del cuento chino- los mecanismo conductuales que llevan a la lucha de mercado por obtener el poder y enterarnos de cosas que no habíamos pensado nunca al no estar "iniciados" en temas políticos por no ser estos objeto de la poesía aunque sí de los "cuentos chinos" donde sólo constatamos los efectos de esas causas que explica Pichy, debido a que se cuentan cuentos chinos tan realistas, tan realistas, que provocan emociones de ensayos realistas, por lo que se puede decir: he ahí el poema.

    ResponderEliminar
  11. Continuación 2
    Y ahora os voy a dar mi opinión sobre el asunto total, aunque os la he ido dando y enseñando en "aproximaciones a..." comentarios, estudios y opiniones diversas y, como no, en mis propios poemas.
    Mirad: empezamos explicando lo que es (o quiere ser) la poesía y distinguimos de ella los poemas (el poema) como la consecuencia y manifestación necesaria del ser humano al encuentro con el pensamiento y la vida, como todo arte, pero como el lenguaje y la palabra articulada es el primer mecanismo humano que permite manifestar las ideas y los sentimientos que nos hace distinguirnos de los animales, es por lo que se dice que es el arte poético, el arte por excelencia.
    Después vimos un estudio sobre el concepto total sobre "qué es poesía", su fundamento, historia, tendencias y teoría poética.
    Más tarde hablamos de los poemas clásicos, su estructura, su métrica, etc. (Pichy nos enseñó a hacer décimas y sonetos porque es un buen decimista, pues bien le enseñaron en la escuela a trabajar como método didáctico de expresión y camino hacia la poesía)
    Y más tarde hablamos de la poética modernista y el versolibrismo, incluyendo el poema de verso blanco total sin asonancias. Entendimos la importancia de la síntesis, de lo claro y de lo hermético como metalenguaje especial de la poesía poemizada. Hablamos del simbolismo, del ultraísmo, del surrealismo, del neomodernismo, de la poética de la experiencia, de la conciencia y de lo social...y vimos muchos autores reconocidos como son Huidobro, Paz, Neruda, Cortazar, Pizarnik, Nicanor Parra, León Felipe, Martí, los diversos autores de la Generación del 27 y algunos autores de la generación del 50...Gil de Biedma, Brines, Valente, Blas de Otero, e incluso hablamos de Pessoa y sus heterónimos...y nos quedamos cortos porque hay mucho más y más y más, y más que vendrá y hoy se da en la actualidad con los recientes y rápidos cambios sociales que inicia una actualísima era que nada tiene que ver con lo conocido hasta ahora y que, todavía, no se ha etiquetado ni tiene nombre propio, aunque se hable de globalización y de era robótica, pero que se nota por los avances de la técnica y, sobre todo, por el Internet. Hay una gran ruptura con el pasado donde la ética no tiene cábida y sólo la economía y el poder que se emancipa del bienestar social, domina y predomina todo movimiento social, produciendo indignación, insatisfacción, y desencanto en la cotidianidad de la vida humana de los pueblos, las tribus y los individuos.
    Explicamos que, en un poema, es más importante la forma que el fondo, porque el fondo o contenido necesita un continente atractivo. El tema de un poema se clava en el "alma" por la forma rítmica de sus versos y no al revés, puesto que los sentimientos y emociones se captan por los sentidos y se transmiten por el mismo canal.
    Toda nueva experiencia poética es producto de una ruptura conceptual y dinámica de las razones sociales y si hoy es un momento crítico para el progreso social y la mejor distribución de la riqueza, para la ciencia y la tecnología, para las ideologías y la filosofía, también lo es para la poesía y los poetas.
    El espíritu de los pueblos y de los individuos está más representado por la poesía que por la filosofía, -aunque todo poeta es un filósofo, un pensador, un revolucionario, un revelador o un loco- y aunque digan y se afirme que es la religión la que mueve los destinos espirituales del ser humano, lo cierto es que el ser humano es más poeta que religioso, porque el que reza está haciendo poesía, catarsis y psicoanálisis del ser y de su ser, sin lo cual no le es posible vivir.
    Por eso hoy, en el mundo globalizado hay mucha gente que escribe poemas, que expresa sus sentimientos y pensamientos escribiendo, hay mucho cantautor y mucho trovador, porque nos es necesario gritar, en silencio, lo que me duele y lo que me hace gozar.



    ResponderEliminar
  12. Continuación 3
    Y ahora que ya sabéis todo o más que yo sobre poética y tenéis la curiosidad de indagar, elaborar y escribir. Ahora que habéis descubierto vuestra voz -aún con las dudas propias de todo ser humano: quien soy, de donde vengo a donde voy- y sabéis leer entre líneas los símbolos de la expresión de dolor o gozo en el poema y podéis hacer crítica sobre la poética en general. Ahora, ahora sois poetas. Y por ello, quiero aclararos para no llamarnos engaño, que hay tantos estilos de poemas como poetas escribiendo, que no hay varias tendencias sino una sola: la buena poesía sin más calificativos ni etiquetas y lo que de verdad importa en un poema es la habilidad de transformar el sentimiento en idea, en palabra veraz, contundente, simbólica pero real, que produzca ilusión, sueños y realidad de gozo y esperanza.
    Os confieso que yo no escribo para nadie. Escribo para mi mismo, para salvarme entendiendo que he de ser mejor cada día. Mejor persona, con más conocimiento, y con mayor calidad de crítica o discernimiento de lo que vale o de lo que no vale en esta vida, que es a lo que se llama sabiduría (no a saber muchas cosas, sino saber separar el bien del mal o como la duda metódica de Descartes, saber encontrar las certezas fundamentales de mi vida para intentar ser feliz.
    El concepto de "vivir la vida a tope" -que los jóvenes usan hoy, y que en mis tiempos de joven se decía "poder realizarse como persona en la sociedad"- está equivocado hoy debido a la mucha información que avasalla la mente humana, los cambios tan rápidos y bruscos que superan el umbral de adaptación humano, las teoría sofistas de la economía y la nueva organización social mediante tecnología y ciencia sin ética y sin estética, solo con moralina o "doble moral" nos está llevando a vivir topando y no a tope. Porque "vivir a tope" es saber abrirse en canal y desangrarse por amor a sí mismo y al prójimo y revelarlo en cada poema.
    Hoy goza muy poca gente con una puesta de sol o contemplar la maravilla que es ver una rama con apariencia de sequedad en invierno y cuando llega la primavera, le nace una yema, como mágicamente, de color rojo, que se convertirá en una hoja más o menos grande, de figuras caprichosas y color verde, que explica el misterio de la vida.

    ResponderEliminar
  13. Continuación 4
    Y también os quiero confesar que yo he escrito poemas desde mi infancia, sin saber por qué lo hacia, ni cómo, era una necesidad en mi como el que besa y llora, como el que ama y da, como el que busca y encuentra. Y sólo escribo en poemas porque estos me obligan a escribir, digo tanto como quiero o necesito decir en ellos y requieren poca escritura y corto espacio para decir mucho. Y puedo escribir, en poema, un cuento, una teoría, una ilusión, un amor, un dolor, una noticia periodística, una cotidianidad o un mito y hasta la lista de la compra, porque sólo me interesa encontrar la belleza y la sencillez. Y cuando todo se hace complejo y se complica y pierdo este horizonte, no soy feliz.
    A veces necesito tres meses para escribir veinte versos y, otras veces, necesito tres versos, para escribir veinte veces veinte experiencias de mi vida. Mi memoria es muy corta y los olvida durmiendo y durante el sueño estoy escribiendo poemas que luego no recuerdo. Como digo, mi memoria es muy limitada y se me olvidan las palabras, recordar un camino me cuesta trabajo, y no es que esté desorientado, es que no me interesan los entramados, sino el horizonte y, para ello, necesito estar constantemente leyendo, relacionando conceptos, preguntando y escribiendo.
    Mi pequeño patio es el lugar de mis poemas que, los encuentro, allí, pintados en la pared, como una aparición. Entiendo que soy una "rara avis" y que estoy un poco loco, pero amo la vida profundamente, la luz y las experiencias humanas y con vosotros ha sido un estamento claro de todo cuanto anhelo y deseo: amistad.
    Y por todo lo expuesto aquí, deducir que toda la poesía es buena, la clásica y la moderna, la actual y la futura, y cualquier tendencia o forma poética, al ser producto de la esencia humana y la cultura que desarrolle el individuo, será buena si, al entrarte por los sentidos, te conmueve. No hay normas para el bell canto, cuando el bell canto se hace automático y se educa la voz. Para expresarse en poemas, tampoco.
    © Luis Vargas Alejo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Aquí, no fue donde "metí la cuchareta", fue en "Días de Lluvia" de Bego.
      Muy interesante y de merecer, todo lo que nos comunicas en estos comentarios.
      Siempre aportas mucho: te lo agradecemos. Es cierto que tus ensayos son instructivos y abarcadores; pero,es menester, que en cada oportunidad, los sigas enriqueciendo.
      Estos comentarios me llevan a presentarles un poema, que me ha gustado mucho, y me llama la curiosidad a saber cómo les resulta a ustedes.
      Fuerte abrazo

      Eliminar
  14. Muchas gracias por la aclaración documentada, y por ratificar a Pichy para que no me desvíe. Me gusta mi "voz poética" pero no por eso, voy a dejar de probar mas palos, porque la poesía me gusta TODA. Ahora, que este poema, por decirlo de alguna forma, no me hizo tilín, no significa que no me interese su entramado.
    Escribirás para ti, por necesidad, por desahogo, como libertad..., y no lo dudo, pero en tus poemas, ensayos, comentarios, etc. está gran parte de mi aprendizaje. De que soy yo la que he querido aprender, no hay duda, pero eres tú el que me lo has enseñado, consciente o no de ello.
    Tengo que seguir vuestros pasos, avances, pruebas…, pues sois mi referente poético, pensad que no tengo escuela en esta materia, y vosotros me guiais, porque así lo decidí. Yo estudié ciencias y puras, la literatura me quedó pendiente. Ahora ,y gracias a vosotros, voy cubriendo mis cadencias; es admirable la cultura que poseéis y el dominio de la poética, es más, siento envidia sana.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. CONTINUACION

      Es cierto que he escrito mucho, pero no era poesía, eran situaciones, pensamientos, como el que escribe un diario por si algún día pierde la memoria. De poesía lo más que sabía, era la canción del Pirata que me hicieron aprender de memoria y aún recuerdo, y un trabajo de Machado, vida, obra y pensamientos (así se titulaba), para rellenar un hueco en una revista literaria del instituto. Sí, decidí coger periodismo como asignatura optativa para subir la nota final, a falta de plazas para dibujo lineal.
      Desde que os leo, y estoy escribiendo poesía, me he dado cuenta de la necesidad de escribirla, pues cuando logro un poema, siento alivio, sin embargo otras veces no puedo porque no hallo el cómo hacerlo de ahí que, palo que tocáis, allá que voy.
      y según dijo Antonio Machado en, 1937 en el periódico la Vanguardia, sobre la difusión de la cultura (expongo esto porque creo le va a estos comentarios) :

      El poeta y el pueblo

      Cuando alguien me preguntó, hace ya muchos años, ¿piensa usted que el poeta debe escribir para el pueblo, o permanecer encerrado en su torre de marfil –era el tópico al uso de aquellos días– consagrado a una actividad aristocrática en esferas de la cultura sólo accesibles a una minoría selecta?, yo contesté con estas palabras, que a muchos parecieron un tanto ingenuas: «Escribir para el pueblo –decía un maestro– ¡qué más quisiera yo! Deseoso de escribir para el pueblo, aprendí de él cuanto pude, mucho menos –claro está– de lo que él sabe. Escribir para el pueblo es, por de pronto, escribir para el hombre de nuestra raza, de nuestra tierra, de nuestra habla, tres cosas de inagotable contenido que no acabamos nunca de conocer. Y es mucho más, porque escribir para el pueblo nos obliga a rebasar las fronteras de nuestra patria, escribir para los hombres de otras razas, de otras tierras y de otras lenguas. Escribir para el pueblo es llamarse Cervantes, en España; Shakespeare, en Inglaterra; Tolstoi, en Rusia. Es el milagro de los genios de la palabra. Tal vez alguno de ellos lo realizó sin saberlo, sin haberlo deseado siquiera. Día llegará en que sea la suprema aspiración del poeta. En cuanto a mí, mero aprendiz de gay-saber, no creo haber pasado de folklorista, aprendiz, a mi modo, de saber popular.

      Mi respuesta era la de un español consciente de su hispanidad, que sabe, que necesita saber cómo en España casi todo lo grande es obra del pueblo o para el pueblo, cómo en España lo esencialmente aristocrático, en cierto modo, es lo popular. En los primeros meses de la guerra que hoy ensangrienta a España, cuando la contienda no había aún perdido su aspecto de mera guerra civil, yo escribí estas palabras que pretenden justificar mi fe democrática, mi creencia en la superioridad del pueblo sobre las clases privilegiadas.

      Eliminar
    2. CONTINUACION 2

      Los milicianos de 1936
      Después de puesta su vida tantas veces por su ley al tablero...
      I
      ¿Por qué recuerdo yo esta frase de don Jorge Manrique, siempre que veo, hojeando, diarios y revistas, los retratos de nuestros milicianos? Tal vez será, porque estos hombres, no precisamente , sino pueblo en armas, tienen en sus rostros el grave ceño y la expresión concentrada o absorta en lo invisible, de quienes, como dice el poeta, «ponen al tablero su vida por su ley», se juegan esa moneda única –si se pierde, no hay otra– por una causa hondamente sentida. La verdad es que todos estos milicianos parecen capitanes, tanto es el noble señorío de sus rostros.
      II
      Cuando una gran ciudad –como Madrid en estos días– vive una experiencia trágica, cambia totalmente de fisonomía, y en ella advertimos un extraño fenómeno, compensador de muchas amarguras: la súbita desaparición del señorito. Y no es que el señorito, como algunos piensan, huya o se esconda, sino que desaparece – literalmente–, se borra, lo borra la tragedia humana, lo borra el hombre. La verdad es que, como decía Juan de Mairena, no hay señoritos, sino más bien «señoritismo», una forma, entre varias, de hombría degradada, un estilo peculiar de no ser hombre, que puede observarse a veces en individuos de diversas clases sociales, y que nada tiene que ver con los cuellos planchados, las corbatas o el lustre de las botas.
      III
      Entre nosotros, españoles, nada señoritos por naturaleza, el señoritismo es una enfermedad epidérmica, cuyo origen puede encontrarse acaso en la educación jesuítica, profundamente anticristiana y –digámoslo con orgullo—perfectamente antiespañola. Porque el señoritismo lleva implícita una estimativa errónea y servil, que antepone los hechos sociales más de superficie –signos de clase, hábitos o indumentos– a los valores propiamente dichos, religiosos y humanos. El señoritismo ignora, se complace en ignorar –jesuíticamente– la insuperable dignidad del hombre. El pueblo, en cambio, la conoce y la afirma, en ella tiene su cimiento más firme y la ética popular. «Nadie es más que nadie» reza un adagio de Castilla. ¡Expresión perfecta de modestia y de orgullo! Si, «nadie es más que nadie» porque a nadie le es dado aventajarse a todos, pues a todo hay quien gane, en circunstancias de lugar y de tiempo. «Nadie es más que nadie», porque –y éste es el más hondo sentido de la frase–, por mucho que valga un hombre, nunca tendrá valor más alto que el valor de ser hombre. Así habla Castilla, un pueblo de señores, que siempre ha despreciado al señorito.

      Eliminar
    3. CONTINUACION 3

      IV
      Cuando el Cid, el Señor, por obra de una hombría que sus propios enemigos proclaman, se apercibe, en el viejo poema, a romper el cerco que los moros tienen puesto a Valencia, llama a su mujer, doña Jimena, y a sus hijas Elvira y Sol, para que vean «cómo se gana el pan». Con tan divina modestia habla Rodrigo de sus propias hazañas. Es el mismo, empero, que sufre destierro por haberse erguido ante el rey Alfonso y exigiéndole, de hombre a hombre, que jure sobre los Evangelios no deber la corona al fratricidio. Y junto al Cid, gran señor de sí mismo, aparecen en la gesta inmortal aquellos dos infantes de Carrión, cobardes, vanidosos y vengativos; aquellos dos señoritos felones, estampas definitivas de una aristocracia encanallada. Alguien ha señalado, con certero tino, que el Poema del Cid es la lucha entre una democracia naciente y una aristocracia declinante. Yo diría, mejor, entre la hombría castellana y el señoritismo leonés de aquellos tiempos.
      V
      No faltará quien piense que las sombras de los yernos del Cid acompañan hoy a los ejércitos facciosos y les aconsejan hazañas tan lamentables como aquella del «robledo de Corpes». No afirmaré yo tanto, porque no me gusta denigrar al adversario. Pero creo, con toda el alma, que la sombra de Rodrigo acompaña a nuestros heroicos milicianos y que en el Juicio de Dios que hoy, como entonces, tiene lugar a orillas del Tajo, triunfarán otra vez los mejores. O habrá que faltarle al respeto a la misma divinidad.

      Eliminar
    4. CONTINUACION 4

      Entre españoles, lo esencial humano se encuentra con la mayor pureza y el más acusado relieve en el alma popular. Yo no sé si puede decirse lo mismo de otros países. Mi folklore no ha traspuesto las fronteras de mi patria. Pero me atrevo a asegurar que en España el prejuicio aristocrático, el de escribir exclusivamente para los mejores, pueda aceptarse y aún convertirse, en norma literaria, sólo con esta advertencia: la aristocracia española está en el pueblo, escribiendo para el pueblo se escribe para los mejores. Si quisiéramos piadosamente, no excluir del goce de una literatura popular a las llamadas clases altas tendríamos que rebajar el nivel humano y la categoría estética de las obras que hizo suyas el pueblo y entreverarlas con frivolidades y pedanterías. De un modo más o menos consciente es esto lo que muchas veces hicieron nuestros clásicos. Todo cuanto hay de superfluo en «El Quijote» no proviene de concesiones hechas al gusto popular, o como se decía antes, a la necedad del vulgo, sino, por el contrario, a la perversión estética de la corte. Alguien ha dicho con frase desmesurada, inaceptable ad pedem litera, pero con profundo sentido de verdad; en nuestra gran literatura casi todo lo que no es folklore es pedantería.
      * * *
      Pero dejando a un lado el aspecto español o, mejor, españolista de la cuestión que se encierra, a mi juicio, en este claro dilema: o escribimos sin olvidar, al pueblo, o sólo escribiremos tonterías, y volviendo al aspecto universal del problema, que es el de la difusión de la cultura, y el de su defensa, voy a leeros palabras de Juan de Mairena, un profesor apócrifo o hipotético, que proyectaba en nuestra patria una Escuela Popular de Sabiduría Superior.
      La cultura vista desde fuera, como la ven quienes nunca contribuyeron a crearla, puede aparecer como un caudal en numerario o mercancías, el cual, repartido entre muchos, entre los más, no es suficiente para enriquecer a nadie. La difusión de la cultura sería para los que así piensan –si esto es pensar– un despilfarro o dilapidación de la cultura, realmente lamentable. ¡Esto es tan lógico!... Pero es extraño que sean, a veces, los antimarxistas, que combaten la interpretación materialista de la Historia, quienes expongan una concepción tan espesamente materialista de la difusión cultural.
      En efecto, la cultura vista desde fuera, como si dijéramos desde la ignorancia o, también, desde la pedantería, puede aparecer como un tesoro cuya posesión y custodia sean el privilegio de unos pocos; y el ansia de cultura que siente el pueblo, y que nosotros quisiéramos contribuir a aumentar en el pueblo, aparecería como la amenaza a un sagrado depósito. Pero nosotros, que vemos la cultura desde dentro, quiero decir desde el hombre mismo, no pensamos ni en el caudal, ni en el tesoro, ni en el depósito de la cultura, como en fondos o existencias que puedan acapararse, por un lado, o, por otro, repartirse a voleo, mucho menos que puedan ser entrados a saco por las turbas. Para nosotros, defender y difundir la cultura es una misma cosa: aumentar en el mundo el humano tesoro de conciencia vigilante. ¿Cómo? Despertando al dormido. Y mientras mayor sea el número de despiertos...
      Para mí –decía Juan de Mairena– sólo habría una razón atendible contra una gran difusión de la cultura –o tránsito de la cultura concentrada en un estrecho círculo de elegidos o privilegiados a otros ámbitos más extensos –si averiguásemos que el principio de Carnot-Clausius, rige también para esa clase de energía espiritual que despierta al durmiente. En ese caso, habríamos de proceder con sumo tiento; porque una difusión de la cultura implicaría, a fin de cuentas, una degradación de la misma que la hiciese prácticamente inútil. Pero nada hay averiguado, a mi juicio, sobre este particular. Nada serio podríamos oponer a una tesis contraria que, de acuerdo con la más acusada apariencia, afirmase la constante reversibilidad de la energía espiritual que produce la cultura.

      Eliminar
    5. Yo no he estudiado ni letras, ni ciencias. Estudie psicología que no es lo uno ni lo otro y me sirvió de muy poco. Donde he aprendido todo lo que creo saber, lo aprendí en los libros de poesía.

      Esto lo escribí allá por los años 1960

      Yo nunca estudié la técnica
      de hacer un verso sin par,
      ni nunca supe de métrica,
      ni de ritmo ni de compas.

      Pero tuve la esencia amiga
      para poderme expresar
      con simples verso de siega
      que proyectan mi pesar.

      De manera muy constante
      escribí sobre la soledad
      y no pude ni un instante
      de buscar siempre, la verdad.

      © Luis Vargas

      Eliminar
  15. CONTINUACION 5

    * * *
    Para nosotros, la cultura ni proviene de energía que se degrada al propagarse, ni es caudal que se aminore al repartirse; su defensa, obra será de actividad generosa que lleva implícitas las dos más hondas paradojas de la ética: sólo se pierde lo que se guarda, sólo se gana lo que se da.
    Enseñad al que no sabe; despertad al dormido; llamad a la puerta de todos los corazones, de todas las conciencias; y como tampoco es el hombre para la cultura, sino la cultura para el hombre, para todos los hombres, para cada hombre, de ningún modo un fardo ingente para levantado en vilo por todos los hombres, de tal suerte que tan sólo el peso de la cultura, pueda repartirse entre todos; si mañana un vendaval de cinismo, de elementalidad humana, sacude el árbol de la cultura y se lleva algo más que sus hojas secas, no os asustéis. Los árboles demasiado frondosos necesitan perder algunas de sus ramas, en beneficio de sus frutos. Y a falta de una poda sabia y consciente, pudiera ser bueno el huracán.
    Antonio Machado
    Texto original por si queréis verlo:
    http://hemeroteca.lavanguardia.com/preview/1937/07/16/pagina-1/33124947/pdf.html

    ResponderEliminar
  16. Qué bien recibo las palabras de Machado, amiga. Denoto ideas martianas en el escrito. El nombre Begoña es más lindo que el de Modesta: eres la alumna más aventajada del Señor que no guía, lo sabemos. Tu decir poético es de mucha belleza y frescura, y va muy bien con estos tiempos. Ya quisiera un servidor tener la base que denotas en el dominio del idioma (claro, no soy buen punto de comparación —eso lo sabemos—, hasta se puede decir, y es verdad, que me quedé en los inicios; bno, no sé si te lo he contado, mis estudios fueron en cursos acelerados, especiales, ante la falta de profesionales, y mi secundaria e instituto fueron encaminados a la marina, exclusivamente. Así, que mi ortografía, léxico, etc, es sólo adquirido de las lecturas, sobre todo, de historia —porque, todas las asignaturas de humanidades, fueron ignoradas en mi formación—. Ah, sobre entendieron, que estaba graduado de la educación primaria; que era verdad, pero, puedes imaginarte, que aunque aprobé con facilidad la prueba de nivel —acá, cuando terminas los seis grados, tienes que presentarte a una "prueba de nivel" confeccionada por el Ministerio de Educación; que es un examen de todas las materias, sino la vences, tienes que repetir el 6to grado—, vale decir que pasé la primaria en "cursos acelerados", en 2 años y algo. Bno, para no aburrirte, cuando comencé en la Academia —que los profesores, aún eran de élites, y gustaban de “elevarse" y presumir de sus culturas—, a veces me quedaba en Babia). Por lo que, no debes quejarte de tu formación, que considero buena, tal está demostrado en todo este tiempo que llevamos en la Senda, tras Luvar. Muchas gracias por presentarnos estas palabras del poeta, que al menos yo nunca había leído.
    Besos

    ResponderEliminar

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.