Hasta
el vino que borra
todos los desencuentros
regresa las ideas
disfuncionales
que ante el azar te
rinden.
No sé reivindicarte
en este presente,
de tantas ausencias y
alegorías,
cuando la escarcha
disimula las causas
y no hay piel para
tanta acidez.
Todo está oprimido,
porque sí,
y duele saberlo; pero,
la verdad
no es una dulce
prebenda
cuando el que razona
sufre
porque la luz
pierde ante las
sombras.
pichy
Un poema magnífico por su gran ritmo y su cantidad de metáforas que insinúan el sufrimiento es consustancial al hombre como la injusticia más grande del mundo.
ResponderEliminarMuchas gracias, amigo, por el comentario —qué tanto me satiosface—.
ResponderEliminarAbrazos