Esta pintura "Niña Mirando al Mar" de Sussana Marco Figueroa, no tiene nada que ver con mi forma de pintar. Esta pintura es dúctil, realista, muy dibujada y muy trabajada mientras que la mía no se puede clasificar, podría ser impresionista acercándose a Van Gog, de trazos fuertes y anchos, donde los que importa no es la forma sino el color y la sensación ambiental. Todas las comparaciones son odiosas y aunque dicen que siempre hay que tener un referente, el mío, es sólo el impulso del subconsciente sobre la tela blanca. No me fijo en ningún autor y suelo sacar mis óleos de fotografías que hice yo o que hicieron otros, interpretándolas conforme el ánimo del momento. Yo no pinto la arena, yo hago la arena...etc.etc. (compáralas de verdad en el trazo, en el dibujo, en el color...y verás que nada tiene que ver)
______________________________________________________________________________
suntuosos
y presumidos
de
ser tierra de la tierra
donde
han crecido los años
entre
neblinas del tiempo.
Desnudándose
cada invierno
para
vestirse en primavera,
con
su textura acorchada
ahuecado
y solitario
soporta
frío, viento y lluvia
a
la ribera del río
donde
duermen los sueños
de
los sueños.
© Luis Vargas alejo
Se me da bien logrado el poema, amigo.
ResponderEliminarAbrazo
¿y el cuadro no te dice nada?
ResponderEliminarAh, disculpa. Sí, claro que me dice...y, mira —ya que vengo de hablarte al respecto de la pintura y mi in-dominio de la técnica— voy notando que tu pintura tiene su sello...quizás por eso no me fijé mucho en la misma, para serte sincero. No sé explicártelo, claro que no, pero, voy reconociendo tus cuadros. Incluso, para que veas que no ando ajeno de tus labores, he comparado, pensado modelos de otros pintores, por ti tomados como ideas —para recrear a tu forma—, o pinturas con temas iguales, no sé decirte. Y esto me va llevando a identificar tu hacer, tu forma o estilo, el gusto por ciertos tonos, etc.. Mi primera comparación la realicé entre Niña mirando al mar, o algo así, y Laura mirando al mar, de una tal Sussana Marco Figueroa. Quizás logre, algún día, la plena identificación de tus pinturas —que colecciono—, como me es dado con tus poemas. El sello personal, me resulta muy relevante. Pienso que ¨eso¨ es lo que dice si una persona ya es, realmente, un artista —un pintor o un poeta, en el caso que nos ocupa—.
EliminarNo soy un despreocupado, amigo. Ni me tomo nuestros asuntos con ligereza. Mucho admiro la poética tuya, y la de Bego —tan fresca y actual—. Ya sus voces me son comunes…a pesar de tus búsquedas de nuevas formas, de tus experimentales proteo-pomas, etc, etc., hasta en las rimas, siempre aparece tu personal voz….Pasa, que tengo mis limitaciones culturales + léxicas + expresivas —sin mencionar mi discapacidad mental.
Fuerte abrazo.
Sí, mi pintura tiene un sello: la expresión y fuerza de mi interior, desbocada por la ansiedad.
EliminarNada tiene que ver con otros pintores. Ni voy a ver exposiciones de pintura, ni me fijo en como lo hacen los demás. Yo pinto, simplemente, como desfogue de adrenalina.
Pues, lo que yo digo: eres una especie de genio autodidacta. Pocos logran alcanzar un oficio sin maestros ni referencias. …así, ya montas videos, realizas artesanías…y, tienes por ahí, olvidada, una novela —o, al menos, nada dices al respecto—. Cosa extraña, porque tengo la percepción de que no eres de los que dejan cosas a medias.
EliminarAbrazos
No, de genio nada, autodidacta sí, pero yo soy así, mira: (emulando al poema de Neruda)
EliminarSoy hombre de nariz larga
mirada azul, pelo cano,
abdomen prominente,
corto de piernas, largo de luz;
pies cansados, tez morena,
que apenas supo de amores
y escribió versos de amor.
Parco en palabras, confundido entre rimas,
con soplos arrítmicos en el corazón,
de emociones y sentires intoxicado,
estrellado en las estrellas, en la mar,
en las montañas, en la luna,
y de profesión:
amante de lo eterno;
universal del mundo de mi casa,
amigo de mis amigos,
impertérrito para enemigos, entrometido
en lo íntimo, mal educado en todo,
egocéntrico, tímido entre multitudes,
solitario, arrepentido de no poder
ser mejor;
navegante de sutiles océanos sutiles
imaginarios,
diabético de almas dulces,
catador de vinos espumosos
en cuencos de amadoras;
afortunado en tormentas,
discreto y descarado,
miembro de los nostálgicos,
ansioso amante de los llanos
y lo sencillo,
melancólico en el silencio,
bibliotecario de vocación, lento
para viajar, ocurrente, insospechado,
común y vulgar durante toda la vida,
escolar de cuaderno bajo el brazo
y artesano de la bondad;
hipocondríaco / somatizador
que duerme a pierna suelta
con intranquilidad entre sueños
de veleidades subyacentes
nada concretas
sin deseos de poder, ni gloria,
ni popularidad;
ordenado, persistente, valiente con miedo,
horizontal levitado, activo mental, libertario,
distante,
cercano,
poeta por maldición
e idiota de nacimiento.
(para ver mi curriculum completo preguntarle a mis amigos, a mi madre
-que ya murió- a mis poemas y a los duendes: ellos os dirán lo desastre que soy y cuales mis títulos honoríficos)
Hombre, vamos por parte, que no quise decir que copiaras de otros pintores; soy yo que me detengo ante un cuadro, una pintura, que me recuerda alguna tuya y comparo...solo quise abundar en el comentario, y hacerte ver, que no les ¨paso¨la vista y ya. No, las colecciono y muchas las recuerdo —quizás de tanto verlas en el refrescador de pantalla—. Como en todas las artes, los artistas tienen coincidencias en temas —cada cual a su estilo—; pero, cuando pintas marinas, por ej, está la mar y barcos...en los tuyos, en los de Pepe y en los de Juan...Ahora, Pepe gusta del mar azul cielo, Juan del mar azul prusia y Luvar del mar verdi-azul.
EliminarSobre este poema...qué decir, más allá, de que eres un bendito poeta!
Sobre el curriculum...Sabes, pienso, que los poetas se desnudan, sin importan el sujeto o la persona que usen al escribirlo.
No percibo que seas un desastre, y, de serlo: eres un desastre organizado y metódico.
Y ya...que hoy es viernes —gracias a dios— y quiero partir lo antes posible.
Ala, ala!
No, hombre, ya sé que no quieres decir que copie de otros pintores, lo que yo te quiero decir es que nunca estudié técnicas de pintura ni de como otros pintores pintan, yo veo una imagen que me gusta y la interpreto con las pinturas, nada más, sin más sapiencia que la que me dió dios.
EliminarPues...eso, tus palabras lo ratifican, eres una especie de geniecillo. En verdad, mucho tu talento.
EliminarAhora, que copiar de otros pintores tampoco es malo; sobre todo, cuando se parte de una idea...ahí tienes, por ej, al cubano Carlos Enríquez con el ¨Rapto de las mulatas¨ y ¨Gitana tropical¨, que toma pinturas famosas y las adapta a nuestro contexto —bueno, es más o menos, lo que me explicas: es solo coger la idea—. Creo, que dios te dio bastante —vaya que, aunque dicen que Jesús fue el primer comunista...la verdad es que dios no reparte parejo—.
Abrazos
No, no es malo copiar a otros pintores, pero a mí no me ha dado por ahí...¡qué le vamos a hacer! yo si cojo el pincel es para pintar lo que quiera y como quiera, unas veces sale mejor, otras peor, porque la pintura como la poesía, depende del estado de ánimo, como cualquier arte, por eso digo yo que tu vecino el de los monigotes marrones cruzado con rayas negras, pues tiene que tener un ánimo y psiquis muy peculiar siempre...para hacer monigotes yo no pinto, aunque entiendo que en el arte no hay monigotes, sino obras excelsas de primores neutros.
EliminarVale, amigo; pero, al final, y a mi ver, tú tienes talento para todas las artes...poeta, pintor, narrador, artesano, declamador —que es una especialidad, que algunos han pasado a la posteridad por ello—, seguro tienes ojo para la fotografía...En fin, eres un artista.
EliminarAbrazo
Pues, es verdad, también me gusta la fotografía y tengo un diploma de un curso de fotografía de Planeta Agostini 1993 en el que me califican de "excelente" y antes de pintar siempre fotografié la naturaleza y otras veleidades.
EliminarAh, pues se ratifica por por mi expresado!
EliminarSí, eso sí, pero yo soy como el genio de la lámpara, que si no me frota la lámpara algún mecenas o manayer sin "miedo escénico" no salgo...y hasta ahora no he salido de mi lámpara o de mi burbuja...o sea, que soy un genio desconocido que más que genio, soy Eugenio de tercer apellido...
EliminarYa en serio. Sabes muy bien que muchos logran el éxito en vida. Otros, como Compay Segundo, lo alcanzó a los 90 años. No serás un genio; pero, a mi ver, eres un buen poeta. Algo de poesía he leído, y, muchos de los publicados-conocidos, no te superan, y, otros tantos, pueden ser tus discípulos. Claro, en esto —como en casi todo— influye un poquito de suerte o de amistad o intereses, etc., etc. En cualquier momento puede aparecer el mecenas o el interesado, que apueste por tu poética. Y esto, también vale para la Bego —que cada día me gusta más y, pienso yo, que si yo disfruto con su poesía —y, nosotros nos leemos con ojo crítico, mientras los lectores solo buscan el disfrute—; por qué no ha de gustarle a los demás?
EliminarYo apuesto, a que tienes más de 100 poemas bien logrados —y, cuando digo bien logrados, digo, estupendos a los ojos de verdaderos críticos—. Bego, tiene otros tantos…entonces, lo que falta es la oportunidad. Y esta, hay que salir a buscarla —casi siempre—…sí, ya sé bien tu respuesta; pero, me siento en el deber, como amigo, de decírtelo. Para empezar, UDs no deben estar ausentes de ninguno de esos concursos que admiten obras por e-mail —que les cuesta adjuntar una obra a un e-mail y enviarla…nada, no les cuesta nada—; que la mayoría son un fraude, que dependen mucho del gusto de los jurados, etc…es verdad. Yo tampoco creo mucho en los concursitos; pero, hay que tentar la suerte.
Quisiera que lo pensaran, y, no requiero respuestas: que bien las imagino.
Abrazos
ALBA (morera)
ResponderEliminarAy, alba, la caida de tu hoja
acompaña mi despertar
en la trinchera de mi decir.
Las palabras penden del silencio
al igual que el vacío
abriga tu ramaje.
Ay, alba, cuándo volveran a lucir
de tus brazos
la mora del moral, sin zarzas
con sus tres trajes,
blanco, rojo y negro,
endulzando los trinos
del amanecer.
Ay, alba, es heladora
la época invernal
y su desnudez.
Begoña.
Este supera al del maestro, amiga. Qué bien!
ResponderEliminarMe he visto en la obligación de posicionar de diferente manera los versos para poderlos recitar con mi voz, porque a la manera tuya se rompía el ritmo por todos lados. Perdóname.
ResponderEliminar--------------
Ay, alba,
la caida de tu hoja me acompaña
en la trinchera de mi despertar.
Las palabras que penden del silencio
al igual que el vacío de mi decir
abriga el ramaje.
Ay, alba,
¿cuándo volveran a lucir, de tus brazos
la mora del moral, sin zarzas,
con sus trajes,blanco, rojo y negro,
que endulzan los trinos
del amanecer?
Ay, alba,
es heladora la época invernal
y su desnudez.
No hay nada que perdonar, al contrario, gracias. Lo cierto es que no pensé en ritmos, ni en asonancias, solo que tu bosque de olmos me llevó a mi paseo de moreras, ese que se ve desde mi ventana. En primavera es un peligro pasar por debajo, pero ahora en otoño, antes de que caigan sus hojas, es precioso. Las ramas estan anudadas de lado a lado, formando arcos. Y como anécdota y algo que rompe los esquemas, pero no justifica el romper el ritmo, la Calle se llama Bulevar de las Acacias.
Eliminar